El vecino de Cambados que fue detenido en la noche del pasado sábado tras chocar contra un coche de la Guardia Civil y agredir a un agente, quedó en libertad con cargos después de declarar en el juzgado de ese municipio.
Con 47 años y de origen peruano, el acusado, que responde a las iniciales C.L.V., reconoció lo ocurrido ante el juez que decretó su puesta en libertad a la espera de la celebración del juicio, pendiente de que se realicen una serie de pruebas periciales para que se fije la fecha del mismo.
El hombre ya había quedado en libertad el pasado domingo, aunque con la obligación de presentarse en el juzgado para que se le tomase declaración en el día de ayer.
Al acusado se le imputa un delito contra la seguridad del tráfico y otro de resistencia y atentado a la autoridad, este último por provocar heridas leves a uno de los agentes durante el forcejeo que llevó a su detención, mientras la primera imputación responde a los daños causados en varios vehículos y por conducir por el carril contrario, todo ello con evidentes muestras de embriaguez.
Los hechos por los que se encuentra acusado se remontan a las once de la noche del pasado sábado, cuando el vehículo que conducía el cambadés de origen peruano causó daños a varios coches estacionados en el entorno de un supermercado de A Cabana.
Un testigo que se encontraba en la zona fue el que alertó de lo sucedido a las fuerzas de seguridad, desplazándose hasta la zona un coche patrulla de la Guardia Civil.
Choque
Al parecer, cuando los agentes estaban muy cerca del lugar en el que ocurrió el incidente vieron un Seat Arosa
circulando en dirección contraria por el carril de la derecha, y no pudieron evitar la colisión. Esta se registró a escasa velocidad lo que evitó que pudiesen registrarse heridos en el accidente.
Cuando los agentes trataban de identificar al conductor, este se resistió, causando heridas leves a uno de los guardias civiles que tuvo que ser atendido en el Punto de Atención Continuada (PAC) del centro médico de Cambados.
Tras lograr reducir al individuo, los agentes procedieron a practicarle la prueba de alcoholemia, que arrojó un resultado positivo, por lo que le fue inmovilizado el vehículo en el que viajaba en el momento del accidente.
El cambadés se enfrenta a una fuerte sanción por conducir bajo los efectos del alcohol y provocar un accidente, además de a una pena de cárcel por la agresión a un miembro de las fuerzas de seguridad del Estado.
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