Un joven almeriense de 23 años de edad, que ya tenía antecedentes penales, Roque M. S., ha sido condenado tras ser acusado de cometer un delito de atentado a lo que unió una falta de lesiones.
Los hechos cometidos por este joven ocurrieron sobre las siete menos diez del pasado 28 de mayo de este mismo año, en el centro de Almería.
Tras un leve incidente de tráfico en la calle Obispo Orberá en el que se vio involucrado el acusado, se personó una pareja de agentes de la Policía Local. Como consecuencia de ello Roque fue sancionado por estos y el asunto quedó, aparentemente, zanjado.
Sin embargo, al emprender la marcha en su vehículo, el joven tuvo una reacción violenta y, de forma intencionada, atropelló a uno de los agentes que le había sancionado.
Como consecuencia de ello, el policía local tuvo que ser atendido y, aunque las heridas fueron leves, estuvo cinco días en fase de recuperación de las mismas.
Atentado
Debido a que el agente agredido se encontraba de servicio y a que el agresor conocía esta circunstancia, su actitud pasó de ser una agresión común a un atentado.
Aunque el acusado negó que el atropello fuera intencionado y el agredido no pudiera confirmar, precisamente por el 'shock' momentáneo, si lo fue o no, la declaración del otro agente, que fue testigo directo de lo ocurrido, lleva a certificar la intencionalidad en la actitud del acusado. A ello hay que añadir que, tras el atropello, Roque recriminó al policía herido que no se hubiera apartado.
El juez, tras haber practicado las pruebas, procedió a dictar sentencia en la que condenó a Roque M. S. como autor de un delito de atentado con la pena de un año de prisión, y como autor de una falta de lesiones a una multa, así como al pago de una indemnización al agente herido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario